Eworld Machine: fabricante líder de máquinas para ventanas de vidrio, UPVC y aluminio de China desde 2002.
Las operaciones de procesamiento de vidrio dependen en gran medida de la instalación y el funcionamiento de máquinas de arenado para vidrio. La fiabilidad de estos equipos reside en que los fabricantes, fabricantes de ventanas y talleres de vidrio a medida los necesitan para crear superficies esmeriladas, patrones decorativos, acabados que proporcionan privacidad y diseños texturizados.
Con la instalación y el uso correctos de la máquina, se obtiene un granallado limpio y uniforme que mejora la calidad del acabado y minimiza el desperdicio de trabajo. Esta guía le guiará a través de los procesos de la máquina, su instalación, su funcionamiento y las medidas de seguridad que deben tomar todos los operadores. Continúe leyendo para obtener más información.
El sistema de arenado implica el uso de un material abrasivo para tratar la superficie del vidrio y lograr un acabado mate controlado. La arena u otro material se aplica a alta velocidad contra el vidrio en el sistema, eliminando una fina capa. Este proceso es ideal para grabados decorativos, logotipos, paneles de privacidad y preparación de superficies antes del recubrimiento.
Los fabricantes suelen preferir una máquina automática de arenado de vidrio porque mejora la velocidad, la repetibilidad y la eficiencia de la mano de obra. En lugar del arenado manual, el sistema mueve las boquillas y el vidrio automáticamente. Esto reduce la fatiga del operador y ayuda a obtener el mismo acabado en varias piezas.
En las instalaciones de procesamiento de vidrio, este tipo de equipo de pulido de vidrio se utiliza a diario, por lo que la instalación adecuada y el funcionamiento correcto son importantes para el rendimiento y la seguridad a largo plazo.
La instalación es fundamental para el rendimiento de la máquina. Una configuración limpia y estable ayuda a los operadores a obtener resultados precisos, reduce la generación de polvo y previene el desgaste innecesario de las piezas internas.
Comience por encontrar un espacio bien ventilado y nivelado. La máquina genera polvo fino, por lo que es necesario un flujo de aire adecuado para extraerlo y filtrarlo. Asegúrese de que haya suficiente espacio alrededor de la máquina para facilitar el mantenimiento y la carga. Un suelo de hormigón sólido es ideal, ya que soporta el peso y las vibraciones.
Asegúrese de que la capacidad de su compresor de aire se ajuste a los requisitos de la máquina. El arenado es un proceso que requiere un flujo de aire constante, por lo que un compresor demasiado pequeño puede provocar un arenado irregular. Al instalarlo, revise las instrucciones de flujo de aire y presión mínimos del fabricante.
Coloque la máquina y bloquee la base para evitar que se mueva. Conecte la manguera de alimentación de abrasivo y confirme que todas las abrazaderas estén bien apretadas. Coloque las boquillas de chorro y asegúrese de que los rieles o guías sobre los que se mueve la máquina estén limpios y en su lugar. A continuación, conecte el tubo de entrada de aire al compresor.
Asegúrese de que las líneas no estén aceitosas ni presenten ningún tipo de contaminación, ya que cualquier tipo de contaminante puede interferir con el flujo de aire. Conecte el tubo de recolección de polvo al sistema de extracción y verifique la succión en la campana o salida. Una limpieza profunda del polvo ayuda a mantener el interior visible y a cubrir los componentes internos.
La máquina requiere un suministro eléctrico estable. Conecte el sistema según el voltaje indicado en la etiqueta de la máquina. Para evitar problemas de conexión a tierra o conexiones inestables, contrate a electricistas cualificados para el cableado.
Instale paradas de emergencia al alcance del operador. Revise los interruptores de seguridad de la puerta y confirme que la máquina no funcionará si la puerta del armario está abierta. Inspeccione todas las luces indicadoras y alarmas para asegurarse de que funcionen correctamente.
Antes del primer chorro, realice una prueba en seco. Mueva las boquillas a lo largo de su recorrido sin abrasivo para comprobar que el movimiento sea uniforme. Ajuste la altura y el ángulo de la boquilla según el espesor del vidrio que vaya a procesar.
Cargue una pieza de prueba y ejecute un ciclo de baja presión. Revise el patrón de chorreado. Si el acabado se ve irregular, ajuste la velocidad de la boquilla, el flujo de abrasivo o la distancia de trabajo. La calibración durante la instalación ayuda a prevenir problemas de calidad durante la producción.
Tras la instalación, la operación diaria se simplifica. Seguir un procedimiento consistente garantiza una producción fluida y reduce las paradas innecesarias.
Coloque el panel de vidrio en la cinta transportadora o el soporte. Asegúrese de que la pieza esté limpia y libre de polvo. Alinee el vidrio correctamente para que la trayectoria del chorro cubra el área correcta. Para diseños complejos, coloque película de enmascarar o plantillas antes de cargarlo.
Elija el programa de granallado según su trabajo. La mayoría de los sistemas permiten ajustes en:
Comience con ajustes moderados, especialmente al trabajar con materiales nuevos o espesores de vidrio desconocidos. Una presión excesiva puede astillar los bordes, mientras que una presión baja podría no lograr el acabado deseado.
Cierre las puertas del gabinete e inicie el ciclo. El sistema mueve las boquillas sobre el vidrio siguiendo una trayectoria programada. Observe el manómetro para asegurarse de que el compresor suministre un flujo de aire constante. Si su sistema de arenado incluye un transportador automático, supervise el movimiento del vidrio para que se mantenga centrado. Una velocidad uniforme garantiza un acabado liso y uniforme. Evite abrir el gabinete durante el funcionamiento.
Una vez finalizado el ciclo, espere a que el polvo se asiente antes de abrir la puerta. Retire el vidrio con cuidado e inspeccione la superficie. Compruebe que tenga un aspecto mate uniforme. Limpie la máquina al final de cada turno. Vacíe el colector de polvo y revise los niveles de abrasivo. Retirar el material sobrante con antelación evita obstrucciones y ayuda a mantener un rendimiento de granallado constante.
El arenado requiere estrictas medidas de seguridad. El polvo de vidrio y las partículas abrasivas pueden causar lesiones si no se toman las precauciones adecuadas.
Exigir siempre a los operadores que lleven:
Mantenga siempre las puertas del armario cerradas con llave. Debe estar equipado con sistemas automáticos de detección de puertas y los operadores también deben comprobar el correcto cierre de la máquina. Realice un mantenimiento regular de las boquillas, mangueras y filtros. Las boquillas desgastadas pueden alterar el patrón y la eficiencia del chorro. Una manguera dañada puede provocar fugas de sustancias abrasivas, lo que supone un riesgo para la seguridad.
Revise el sistema de extracción de polvo con frecuencia. Una extracción deficiente permite que partículas finas se escapen al área de trabajo, lo que afecta tanto la calidad del aire como el rendimiento de la máquina. Finalmente, capacite a todos los nuevos operadores. Incluso los trabajadores con experiencia necesitan capacitación específica para la máquina para comprender los ajustes de granallado, los pasos de calibración y los procedimientos de solución de problemas.
Un sistema automático de arenado de vidrio, correctamente instalado y en buen estado de funcionamiento, es un paso adelante hacia la uniformidad, calidad y eficiencia de cualquier línea de procesamiento de vidrio. Con una instalación y un uso correctos, y con los procedimientos de seguridad adecuados, los fabricantes pueden obtener acabados limpios y precisos, además de prolongar la vida útil de la máquina.
Una instalación de arenado confiable comienza con un proveedor confiable que proporcione una instalación adecuada, capacitación para operadores y servicio continuo. Eworld Machine satisface estas necesidades ofreciendo soluciones prácticas y duraderas, diseñadas para facilitar los procesos de producción reales.